Nuestro organismo necesita unos niveles adecuados de vitamina D para muchas funciones pero, sobre todo, para que nuestro intestino pueda absorber correctamente el calcio y el fósforo. También es fundamental para el sistema inmunitario. En este artículo te hablamos de los beneficios de la vitamina D y cómo podemos obtenerla con la alimentación o a través de complejos multivitamínicos.
¿Para qué sirve la vitamina D?
La vitamina D es una vitamina liposoluble que actúa en casi todos los órganos y sistemas del organismo. Es muy importante para la salud de los huesos, los dientes y para la absorción del calcio a nivel intestinal. Desempeña un papel fundamental en el sistema nervioso, muscular e inmunitario. La vitamina D también es fundamental en el embarazo donde unos niveles adecuados pueden evitar riesgos como la preeclampsia o la diabetes gestacional.
Para conocer nuestros niveles de vitamina D necesitamos realizar un análisis de sangre. Se consideran unos valores adecuados cuando están entre los 30 y 100 ng/ml. Por el contrario, hablamos de insuficiencia de vitamina D cuando están entre 20 y 30 ng/ml, y de deficiencia, cuando el análisis detecta menos de 20 ng/ml. La deficiencia de vitamina D puede provocar raquitismo en niños y osteomalacia en adultos. Esta enfermedad genera dolor óseo y debilidad muscular. Otras enfermedades que puede provocar la carencia de esta vitamina incluyen: problemas renales, caries, dolor y debilidad muscular, osteoporosis, deterioro de la función respiratoria, etc.
¿Cómo mejorar nuestros niveles de vitamina D?
Podemos obtener más del 10% de esta vitamina a través de la alimentación. Los alimentos que más vitamina D contienen son:
- La leche y sus derivados.
- Las carnes.
- Los pescados azules como el salmón, el atún, la caballa o la sardina.
- Los huevos, sobre todo la yema.
También hay que tener en cuenta que el cuerpo produce vitamina D al exponerse a la luz solar. Si tienes algún tipo de carencia también es recomendable salir a pasear al sol. En casos de déficit severo podemos recurrir a complejos multivitamínicos. Están especialmente recomendados para personas mayores, mujeres en período de lactancia y deportistas, para disminuir el riesgo de osteoporosis y artritis. Además, la suplementación con vitamina D también ayuda a reducir el dolor y la debilidad muscular y mejora la fuerza.
Te recomendamos ponerte en manos de profesionales en nutrición deportiva si eres deportistas y tienes carencias en la vitamina D. Es muy frecuente que atletas con dietas bajas en grasas tengan déficit en esta vitamina. Unos niveles adecuados te ayudarán a la recuperación y cuidado muscular y a sentirte con más energía. Una alimentación saludable también podrá ayudarte a conseguir los niveles que necesitas.