La avena, en todas sus formas es un gran aliado para los desayunos y meriendas de cualquier dieta deportiva. Copos, harina de avena, avena instantánea,… Son muchas las opciones en las que se comercializa. Pero en este artículo vamos a hablarte de una concreto, el salvado de avena. ¿Lo conoces? ¡Ya va siendo hora!
¿Qué es el salvado de avena?
La avena es un grano integral, que está compuesto de tres partes comestibles: el germen, el endospermo y el salvado. Este último, se extrae, únicamente, de la capa exterior de la semilla de este cereal.
Aunque todas las variedades de la avena proceden del mismo cereal tanto su sabor, como su textura, valor nutricional y forma de cocinar son diferentes.
El salvado de avena contiene un alto valor de fibra dietética que te saciará de forma natural durante mucho más tiempo, lo que lo convierte en un alimento fundamental en momentos de definición o precompetición.
Se caracteriza por tener sabor a nuez con un toque semidulce. Varía ligeramente dependiendo de la cocción y la textura de la avena, pero en general ofrece un sabor cremoso.
¿Qué perfil nutricional ofrece el salvado de avena?
Aunque la avena es beneficiosa para el cuerpo en todas sus variedades, sí que es verdad que el salvado tiene algunas propiedades extra que, por ejemplo, la harina de avena.
En el caso del salvado de avena, posee un 3 % de grasas saturadas, libres de colesterol y sodio. Es rica en proteínas, con un 14 % y contiene un 9 % de carbohidratos, de cuyo porcentaje, un 25 % es fibra. Además, dispone de micronutrientes como el calcio, el hierro o el potasio, imprescindibles para un correcto desarrollo del organismo.
Beneficios del salvado de avena
Aunque es un alimento que todos deberíamos integrar en nuestra dieta diaria, el salvado de avena es fundamental para la alimentación del culturista, ya que sus carbohidratos de lenta absorción, las proteínas vegetales, las grasas saludables, las fibras y minerales, ayudan a estimular la masa muscular. Entre sus múltiples beneficios podemos encontrarnos:
- Ayuda a reducir el colesterol por su contenido en fibra soluble.
- Aporta energía gracias a su contenido en macro y micro nutrientes.
- Favorece la digestión, ya que ayuda a tratar padecimientos como disfunciones biliares o hepáticas, estreñimientos, gastritis o úlceras.
- Beneficia al sistema nervioso gracias a su contenido vitamina B, que influye en un mejor vínculo entre mente y musculatura y mejora los tiempos de recuperación.
Como ves, las diferencias nutricionales entre la harina de avena y el salvado son mínimas. Pero si quieres beneficiarte de sus propiedades ha llegado el momento de incluirlo en tu dieta diaria. En nuestra tienda de nutrición deportiva encontrarás múltiples recetas con las que integrar la avena en tus platos. ¡Ponte manos a la obra!